Un éxito internacional tan grande como este disco demostró que un rapero blanco también podía convertirse en la estrella del género. Robert Van Winkle, alias Vanilla Ice, irrumpió en las listas de ventas con un álbum debut del que se distribuyeron más de siete millones de copias antes de que un falso rumor sobre un pasado violento acabara con su carrera.
La polémica rodeo siempre a este rapero que no sólo se miraba en el espejo de MC Hammer, sino que además intentaba negar las influencias del rock y del pop de iconos como David Bowie y Queen con su tema Under Pressure, o de los Rolling Stones en Satisfaction. La tranformación de estas canciones en Ice Ice Baby fue muy rentable para el cantante. Poco después su aparición en tv para negar el plagio de Under Pressure fue votado como el decimosegundo "momento más vergonzoso" de la pantalla.
To The Extreme extendió las redes para pescar en las aguas del Dance, con baladas de tiempo medio y un intento con el gansta rap en Go Ill. El álbum llegó al número 1 del Top 200 de Billboard hasta ser el primero en alcanzar los cinco niveles de certificación en un mes: oro, platino, doble platino, triple platino y cuádruple platino.
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